¿Qué es?
Es una enfermedad provocada por la incapacidad de tu cuerpo para asimilar los azúcares que comes. Esto puede ocurrir por dos motivos. Puede que el páncreas, que es un órgano que tienes situado en la barriga, no produzca la cantidad suficiente de insulina para asimilar estos azúcares o bien que tu cuerpo tenga algún problema para utilizar bien la insulina. La insulina es una hormona que ayuda al azúcar de la sangre a entrar en las células del cuerpo para que tengan energía.
Esta enfermedad se detecta con un análisis de sangre (puede ser una gota de un dedo de la mano) donde se ve que el nivel de glucosa (azúcar) en la sangre es más alto de lo normal.
A tu edad te pueden afectar dos tipos diferentes de diabetes.
Diabetes tipo 1: En este tipo de diabetes se van destruyendo las células del páncreas que generan la Insulina. Es el tipo más habitual en la infancia.
Diabetes tipo 2: Este tipo es menos habitual en la infancia. En estos casos, las células del páncreas todavía pueden producir insulina, aunque no la suficiente. Sin embargo, en algunos casos, se produce suficiente insulina, pero el cuerpo no es capaz de utilizarla.
¿Qué puedes hacer?
En una enfermedad como la diabetes, tú decides. Puedes hacer muchísimas cosas para mantenerla a raya.
- Controla tus niveles de azúcar en la sangre las veces que te hayan recomendado tu enfermera o tu médica.
- Inyéctate la insulina en las cantidades que corresponda. Si todavía no estás preparado, pide ayuda a los padres, a alguien de la familia, o, a los profesores del colegio. También te puede ir bien una bomba de insulina. Es un aparato que calcula qué cantidad de Insulina necesitas en cada momento y te la inyecta automáticamente.
- Recuerda que debes comer de forma saludable para que los niveles de azúcar en la sangre se mantengan óptimos y puedas crecer mucho.
- Haz actividad física, mejor si la haces cada día.
- No faltes a tu cita con el equipo de salud (enfermera-médico) que te ayuda con la diabetes. Con ellos podrás saber si todo va bien y preguntarles si tienes alguna duda.
En según qué momentos te deberás responsabilizar de algunas tareas. Como, por ejemplo:
- Procura comer alguna cosa si haces un viaje largo
- Si te quedas a dormir en casa de un amigo, levántate un poco más temprano que los demás para inyectarte la insulina antes de desayunar.
Piensa que cada vez existen aparatos y fármacos que te hacen más sencillas todas estas tareas. Sobre todo, recuerda que estas pequeñas obligaciones no te deben impedir nunca que hagas las actividades que más te gustan: hacer deporte, viajar, salir con amigos, etc.
